Febrero de 2016, Miguel Bosé aterriza en Ecuador con el fin de promocionar el documental de National Geographic en el que había participado, mismo que fuera dirigido por el reconocido biólogo Enric Sala sobre Las Islas Galápagos. El 12 de febrero, aprovechando la estancia del artista, es invitado tanto él como el biólogo, por el ex mandatario Rafael Correa a un almuerzo en Carondelet, esto en agradecimiento por su colaboración a un proyecto que conmina a las actuales y futuras generaciones a tener conciencia ambiental.
Invitación a la que también asistieron varios cantantes ecuatorianos, además de las tres ganadoras del concurso abierto de Radio Pública “almuerzo con Bosé”, ellas fueron: Emilia Juelas, Ericka Vaca y Martha Samaniego.
Emilia Juelas, de 16 años, estudiante colegial que llegó de su natal Riobamba. De Guayaquil, vino Martha Samaniego, jubilada, para quien fue también su primera vez en Carondelet y Ericka Vaca, también desde La Perla del Pacífico.
El expresidente en aquel almuerzo explícitamente agradeció al cantante por su participación en el documental, además el mandatario destacó la labor del científico que lideró la pieza audiovisual, el biólogo Enric Sala, por su trabajo en pos de la protección del medio ambiente.
Hasta ahí, no existe malicia en la noticia, un excelente trabajo documental se presentaba, un artista con enorme trayectoria en el país, una cena en agradecimiento para los artífices de este producto, empero, para las mentes fútiles, encontrar el nido perfecto para sus ardides y veneno no es difícil.
Y es que a partir de aquel 12 de febrero no han sido pocos los detractores con profunda imaginación y malicia sórdida, los que forjaron historias de subsuelo, diseminando la falacia de un contrato totalmente desmesurado que Presidencia había pagado para un concierto particular en Carondelet del famoso intérprete español.
¿Pruebas para semejantes argucias? Ni una sola, y es que parece no hacerles falta, tan solo fue necesario poner pimienta a la animadversión que la prensa y los políticos de turno sembraban en el ambiente y la mentira parecía jugosa, una oscura con el único objetivo de desvirtuar la imagen del ex mandatario.
Pero, para desmentir el supuesto contrato que la Presidencia había pagado con dinero de los ecuatorianos y ecuatorianas, no hacía falta más que preguntar, la faena es sencilla y a la mano de cualquier ciudadano con afán de la verdad.
Preguntamos a la Secretaría General Administrativa de la Presidencia de la República lo siguiente:
- ¿Existió contratación de artistas internacionales para eventos en Carondelet desde el año 2007 al 2017?
- ¿Existió contratación de artistas internacionales para eventos referentes a turismo y ambiente en el mismo periodo arriba citado?
La respuesta desde Presidencia, léanla a continuación: